Hace unos días te comentaba mi fidelidad a la pobreza, hoy al revisar el mensaje y ver la fotografía me he dado cuenta de algo importante.
En mi adolescencia y juventud estuve muy cerca de ser religiosa, pude estudiar gracias a las Siervas de San José unas monjas que tenían una casa para niñas con pocos recursos económicos, hoy siento un gran agradecimiento y amor hacia ellas.
A los 18 años me plantee la vocación de ser monja, creía profundamente que para seguir a Jesús era necesario ser pobre, es algo que se nos inculca. Si no recuerdo mal, en un pasaje del evangelio dice: Es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja a que un rico entre en el reino de los cielos. Y yo quería entrar en el reino de los cielos.
Quiero darte las gracias por la luz que vas poniendo en mi vida.
¿ Puedo hacer algo para resolver esto ?? ¿ Es suficiente con agradecerles todo cuanto me dieron?
Un abrazo.
Hola Maria Jesús,
agradecer es sacar provecho a lo que te dieron: vivir, disfrutar, servir, compartir.
un gran abrazo