Querida Brigitte,
En otra consulta anterior me comentaste que mis hermanos no me veían como una hermana y que era un regalo. Que podía empezar a serlo haciendo los ejercicio sENCONTRAR NUESTRO LUGAR y «Ver a los padres como una unidad». Ha pasado más de un año y la relación con mi hermana se han transformado siendo ahora más tranquila. Sin embargo, con mi hermano es prácticamente inexistente. Él ocupa el segundo lugar y es como si quisiera ser él el mayor, que soy yo.
¿Es posible hacer el ejercicio de ir ocupando los lugares de la familia de origen para que cada uno ocupe su lugar?
Un abrazo,
Muchas gracias, Brigitte.
Hola Olivia,
lo que impide la buena relación entre hermanos es la presencia de un excluido.
Entonces vas a iamginar tres lugares: uno para ti, otro para hermano y otro para el excluido que os separa.
Te pones alernativamente en cada uno hasta que todo cambie.
Muy cordialmente