Querida Brigitte, cómo podría, por favor, sacar a una participante que asiste a todos mis talleres, del estado padre? En los dos primeros se sentó a mi derecha, en el tercero (el último que he hecho) se sentó a mi izquierda, pues es la de mayor antigüedad en el grupo, y en éste precisamente saltó con claridad ante mis ojos su actitud un poco dominante (…) . He trabajado mi relación con esta cliente dos veces como proyección (una hace meses y otra el sábado pasado), pero me encantaría por favor, si lo ves apropiado, alguna frase que pudiera yo decir para ayudarla y sacarle de ahí en el taller si noto algo. Parece que cuantas mas personas atienden el taller, más grande se siente (por lo de ser la cliente de más antigüedad de momento). He tenido otros clientes anteriores a ella (amigos) que ya no vienen, sería cosa de probar a dejar sus sillas vacías a mi izquierda para reincluirlos? (se me acaba de ocurrir según te escribo). Gracias siempre por tu ayuda, Brigitte. Un abrazo grande.
Participante en estado padre
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querida María,
ella permanece en el estado padre sólo si tú se lo permites, inconscientemente. Quiere decir que cuando está ella, o bien tú te pones en el niño, o bien te pones también en el padre crítico, como ella.
Para salir de ello, es teniendo siempre presente a tus padres, y a los suyos detrás de ella.
Antes de verla, haz el ejercicio de imaginarla delante de ti, y poniéndote alternativamente en ella y en ti, averiguar lo que está pasando. Después te pones en ti y sientes a sus padres detrás de ella y a los tuyos detrás de ti, o piensas en ello si no lo sientes. Y todo cambiará, lo notarás poniéndote de nuevo en ella.
¿Qué puedes decir?
Internamente: «gracias por ser como eres».
A todos: «Nos vamos a centrar más. Todo se vive muy lentamente, totalmente en silencio. La respiración y los llantos también son silenciosos. El dramatismo nos muestra que estamos en una resistencia».
Todo lo que necesitamos sale…
Un gran abrazo